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Existen varias formas de aplazar el dinero a pagar en la declaración de IRPF en la campaña de la RENTA de 2021 a pagar en 2022.
Sumergidos en plena campaña de declaración de IRPF, serán muchos los ciudadanos que tengan una declaración a pagar.
Si por diferentes circunstancias una persona tiene dificultades para hacer frente al pago de su declaración de la Renta, o le interesa fraccionar el pago, existen vías para poder aplazarlo.
La propia Agencia Tributaria ofrece la posibilidad de fraccionar el pago o de solicitar un aplazamiento.
Además de estas soluciones existe la tercera vía que es solicitar un préstamo RENTA en nuestra entidad bancaria, que son préstamos personales diseñados específicamente para financiar el pago de la declaración.
Esta es la opción más habitual. Consiste en dividir el pago en dos veces, el primero al presentar la Declaración y el segundo habría que ingresarlo antes del 5 de noviembre de 2022.
Para utilizar esta fórmula simplemente hay que marcar la casilla de pago fraccionado en la última página de la declaración o en renta web de la Agencia Tributaria.
En el primer pago se abonará el 60% de la cantidad total y en el segundo el 40% restante. Este tipo de fraccionamiento no tiene ningún tipo de costes ni intereses para el contribuyente.
El único requisito es presentar la declaración dentro del plazo legal establecido, por tanto no se podrá optar al fraccionamiento en declaraciones fuera de plazo, y domiciliar el pago de la declaración en una entidad bancaria.
El plazo máximo es hasta el 25 de junio de 2022 si se domicilia el pago, que es lo habitual si fraccionamos el pago, aunque hay de plazo hasta el 30 de junio para presentar la declaración si no se domicilia o si el resultado es negativo.
El aplazamiento consiste en pagar a Hacienda en cuotas mensuales las cantidades pendientes.
Este tipo de operación se hace a medida del contribuyente, en cuanto a plazos se refiere, y es el propio contribuyente el que debe presentar una propuesta de calendario de pagos, es decir el plazo (1 año, 3 años, etc).
El contribuyente deberá justificar una causa para solicitar el aplazamiento, ya sean dificultades financieras, falta de tesorería, impagos (trabajador que no cobra las nóminas o autónomo que tiene impagos, etc).
Hasta un aplazamiento de 6.000 euros no hay que aportar ningún tipo de garantía, pero a partir de los 6.000 euros de deuda con Hacienda puede ser necesario aportar alguna garantía (garantía hipotecaria, aval, garantía personal, etc.).
Para solicitar un aplazamiento debemos acudir a la sede de la Agencia Tributaria de nuestra localidad o tramitarlo por Internet en la sección Aplazamientos de la AEAT, una vez dentro hay dos posibilidades diferentes, una para aplazamientos inferiores a 18.000 euros y otro para aplazamientos que superan los 18.000 euros, elegiremos la que corresponda para iniciar el trámite.
Si la Agencia aprueba el aplazamiento no será gratis, ya que cobran el interés legal establecido, actualmente alrededor de un 5% TAE.
Prácticamente todos los bancos ofrecen algún tipo de préstamo para pagar en cuotas mensuales la Declaración de la Renta.
El Banco paga la declaración completamente y luego ellos nos cobran la cantidad mes a mes a cambio de un tipo de interés.
Algunos ejemplos son los siguientes:
Por descontado hay que ser cliente del banco y la financiación suele ser automática. Por regla general el plazo será de 12 meses.
Todas las entidades tienen productos de préstamos para pagar la Declaración de la Renta para sus clientes con nómina domiciliada (o Seguridad Social en caso de autónomos).
Si necesitas financiar el importe de tu Declaración de IRPF no dudes en consultar con tu banco o nuestro comparador de préstamos personales.