Contenido del artículo
La Ley de Segunda Oportunidad es una opción que existe para aquellas personas que se han sobreendeudado y no pueden hacer frente a sus deudas.
Gracias a esta ley, tienen la opción de renegociar sus pagos para poder hacerles frente.
Sin embargo, no todas las personas que han adquirido demasiadas deudas pueden acogerse a los beneficios de esta ley.
En este artículo te contamos todo lo que te hace falta saber para que puedas hacer uso de la Ley de Segunda Oportunidad y cancelar tus deudas.
Al contrario de lo que algunas personas piensan, la Ley de Segunda Oportunidad para personas físicas y autónomos no es una forma de huir del pago de las deudas.
Esta ley es una opción válida para quienes tienen demasiadas deudas y no pueden hacerles frente, siempre que actúen de buena fe.
Para poder acogerte a esta ley y renegociar tus pagos, es necesario que cumplas con los requisitos estipulados y que tengas un buen historial crediticio.
Alguien que cuente con un registro de impagos frecuente no podrá acogerse a esta ley.
Según el BOE, esta ley ha sido pensada para ayudar a quienes son buenos pagadores de sus deudas, pero se han visto enredados en una situación de sobreendeudamiento.
No es una manera de escapar de las deudas, sino una forma de renegociar los pagos para poder hacerles frente.
Regulada por el Real Decreto Ley 1/2015, la Ley de Segunda Oportunidad es la única manera legal de acordar una nueva forma de pago con la entidad de tus préstamos.
Además, gracias a ella, si la negociación con la entidad no llega a ningún lado, puedes solicitar la cancelación total de tu deuda.
La Ley de Segunda Oportunidad ha sido pensada para que los ciudadanos puedan cancelar sus deudas y volver a empezar.
Pero no todas las personas que tienen deudas pueden acogerse a esta ley, simplemente por querer empezar de cero.
Para que puedas acogerte a esta ley y cancelar tus deudas, tienes que cumplir con los siguientes requisitos:
Puede que hayas entendido claramente los últimos dos requisitos, pero que te preguntes qué se considera exactamente actuar de buena fe.
A continuación, te contaremos cómo puedes demostrar que actúas de buena fe:
Para demostrar que actúas de buena fe, deben darse todos los puntos que hemos mencionado. Es muy importante que sepas que si alguno de ellos no se cumple en tu caso, no podrás acogerte a la Ley de Segunda Oportunidad.
La Ley de Segunda Oportunidad cuenta con dos instrumentos. El primero son los acuerdos extrajudiciales; y, el segundo, el beneficio de exoneración de las deudas.
Veamos cómo funciona cada uno de ellos
Antes de acudir a la justicia y tratar de acogerte a la Ley de Segunda Oportunidad, debes agotar la vía extrajudicial.
Esto significa que, antes de acudir a la ley, debes intentar llegar a un acuerdo con la entidad con la que has contraído tus deudas.
La negociación extrajudicial es fundamental para demostrar que actúas de buena fe, y debe estar tutelada por un juez.
También necesitarás hacer uso de un mediador, que puede ser asignado por un notario si eres particular, o por un registrador mercantil si eres un empresario.
En este punto de la negociación, se propondrá un plan de pagos y un calendario.
Obviamente, se tratará de un plan de pagos al que puedas hacer frente. Si durante este proceso que tiene un límite de duración de 2 meses, el acreedor no da una respuesta satisfactoria, se pasa al siguiente instrumento: el beneficio de exoneración.
Si no se alcanza un acuerdo con el acreedor mediante la vía extrajudicial, podemos acudir al juez para solicitar la exoneración de la deuda.
En este punto, el proceso es más delicado, ya que el acreedor puede revocar la decisión del juez si demuestra que has incumplido los pagos, que cuentas con ingresos para pagar tu deuda o que has ocultado datos importantes sobre tu economía.
Por eso, es sumamente importante que cumplas con todos los requisitos en la actuación de buena fe y que facilites todos los datos a tu abogado.
Recuerda que, si tratas de engañar a la justicia, puedes acabar más endeudado por las costas y gastos del juicio.
La ventaja de esta ley es que, si lo has hecho todo bien y la entidad no puede revocar la decisión del juez, podrás comenzar de cero sin deudas.
Antes de lanzarte a solicitar la aplicación de la Ley de Segunda Oportunidad es importante que sepas que no todas las deudas se pueden cancelar haciendo uso de dicha ley.
Aquellas deudas que hayas contraído con Hacienda o con la Seguridad Social no podrán ser eliminadas mediante el uso de esta ley.
Además, tampoco podrás incluir nuevas deudas que hayas contraído una vez iniciado el proceso.
Como has podido ver a lo largo del artículo, es muy importante actuar de buena fe y cumplir con todos los requisitos para que la Ley de Segunda Oportunidad sea realmente beneficiosa.
Pero, sin ninguna duda, esta ley es perfecta para quienes están en bancarrota y necesitan empezar de nuevo.
Acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad tiene un proceso y un coste.
Hay que buscar abogados, si es posible especializados, ir a juicio y afrontar costas.
Si hay que esperar a juicio el proceso se puede demorar.
Por último hay que esperar el resultado, no siempre se consigue eliminar las deudas.
Existe otra posibilidad, que es negociar directamente nuestras deudas con nuestros acreedores.
Generalmente están abiertos a negociar, porque ellos prefieren una rebaja en las deudas antes que no cobrar nada.
Lo bueno de la negociación es que puede ser algo muy rápido, sin largas y tediosas esperas.
Para sentarse a negociar nuestras deudas y conseguir una gran rebaja, e incluso la anulación, lo ideal es ponerse en manos de especialistas; ellos están acostumbrados a negociar y conseguirán mejores resultados que si lo intentamos por nuestra cuenta.
De las empresas especializadas nos gusta Repagalia porque no cobra nada si no obtiene resultados.
Así que por solicitar información y por el estudio del caso no hay que pagar nada. Solamente se pagará una comisión del importe ahorrado si consiguen rebajar efectivamente las deudas del cliente.
Para acceder a Repagalia pincha en la imagen inferior.
Muchas veces es mejor una solución rápida y negociada que un largo proceso incierto y con largos costes.
Además asesorarte no te cuesta nada, ni te compromete a nada. Si no obtienes los resultados esperados puedes ir a juicio después alegando la Ley de Segunda Oportunidad.
Recientemente Cofidis ha modificado los importes que se pueden solicitar en sus créditos y préstamos personales. La cantidad máxima de dinero que se puede pedir en su Crédito Directo, el más popular e..
Al momento de solicitar un préstamo tenemos que tener en cuenta varias cosas pero una de las principales es cuanto vamos a pagar de vuelta y que facilidades tenemos para hacerlo. Cada préstamos es dis..
Todos sabemos que pedir dinero prestado estando en una lista de morosos es bastante difícil, a un banco tradicional no nos podemos ni acercar porque nos van a rechazar la solicitud enseguida. No deses..
Antes de empezar a invertir, antes de ponerse a ahorrar y antes de poder organizar nuestro futuro financiero el primer paso es eliminar deudas. Las deudas son las responsables en la mayoría de las oca..
Ya hemos insistido en varias ocasiones en las elevadas tasas de inflación y en que ciertos indicadores económicos son preocupantes para toda Europa, y en nuestro caso para la zona Euro. Este escenario..
Bank Norwegian es un banco noruego que lleva años en España ofreciendo préstamos personales y tarjetas de crédito como principales productos, aunque con la subida de tipos de interés también ofrece un..
Te mostramos la lista con los últimos minicréditos que han aparecido en el mercado, puedes encontrar minipréstamos con ASNEF, minicréditos sin intereses y, especialmente sin papeles ni preguntas.Minic..
La crisis económica provocada por la elevada inflación ha reducido los ingresos reales de muchas familias e incluso ha aumentado las deudas contraídas y el coste de ellas (caso de las hipotecas), lo q..