La gran mayoría de empresas necesitan financiarse para operar en su día a día. Existen multitud de productos pensados para que los negocios dispongan del dinero suficiente para su funcionamiento, y las tarjetas de crédito para empresas son uno de ellos. Con ellas, el titular dispone de una línea de crédito que le permite abonar todo tipo de gastos y de compras que surjan durante el desempeño de sus labores. Te mostramos las principales tarjetas de empresa para que puedas comparar y elegir la que mejor se adapte a tu negocio.
- TAE:
Consultar
- Cuota anual:
0 €
- Límite de crédito:
Consultar
- Dinero a débito gratis en: Todos los cajeros de Unicaja a débito
- Cuota anual:
Consultar
- Límite de crédito:
3.500 €
- Dinero a débito gratis en: Todos los cajeros de Caixabank
- Cuota anual:
Consultar
- Límite de crédito:
Consultar
- Dinero a débito gratis en: Todos los cajeros Santander
- TAE:
Consultar
- Cuota anual:
33 €
- TAE:
24,60%
- Cuota anual:
0 €
- Límite de crédito:
Consultar
- Dinero a débito gratis en: Servired
Los análisis, valoraciones y opiniones de nuestros expertos sobre los productos y servicios que aparecen en esta página son totalmente objetivos e independientes. Algunos de los productos que aparecen pueden ser de nuestros socios que nos compensan, pudiendo influir en dónde y cómo se muestran. Divulgación de publicidad.
Actualizado a
Las tarjetas de crédito para empresas suponen un nicho dentro del mundo de las tarjetas bancarias que engloba a todas aquellas que están pensadas para autónomos, comercios, negocios y pequeñas y grandes empresas.
Están orientadas tanto hacia el empresario como hacia los trabajadores y tienen una serie de características únicas que las hacen muy útiles para utilizar en el desempeño profesional.
Este tipo de tarjetas pueden servir para cualquier empleado, aunque habitualmente las utilizan los propietarios o encargados para sus gastos de representación, así como los comerciales y transportistas para pagar sus desplazamientos y estancias fuera de la empresa por motivos laborales.

El pago y financiación de las compras de material o mobiliario de oficina pueden ser otros usos que pueden tener estas tarjetas para las empresas.
Peculiaridades de las tarjetas de crédito para empresas
A diferencia de las tarjetas de crédito particulares, las de empresa tienen una serie de servicios y funcionalidades adicionales que las hacen adaptarse a las necesidades de cada negocio. Aquí enumeramos algunas de las más habituales:
- Control de los gastos mediante el acceso en tiempo real a los movimientos de cada tarjeta utilizando la página web del banco. Así es posible conocer en todo momento cuándo y en qué han utilizado la tarjeta los empleados.
- Facturas mensuales con todos los gastos detallados, desglosando el IVA.
- Emisión de múltiples tarjetas para cada empleado con la posibilidad de variar individualmente el límite de crédito de cada una.
- Personalización de la tarjeta de crédito con el logo de la empresa.
- Creación de grupos de tarjetas según al departamento al que vayan dirigidas, con características diferentes unas de otras, según las necesidades.
- Descuentos en carburantes y otros servicios como hoteles o restaurantes.
- Seguros especiales, como el seguro de infidelidad, que cubre las pérdidas que puedan producirse en caso de que algún trabajador realice alguna estafa, fraude o sustracción utilizando la tarjeta de crédito.
- Restricciones. En muchas tarjetas de crédito es posible restringir los establecimientos en los que puede utilizarse, para que el empleado que la utilice no pueda usarla para nada más.
Además de todas estas peculiaridades, las tarjetas para empresa también incorporan todas las funcionalidades y servicios de una tarjeta de crédito habitual, como los seguros de accidente, de asistencia en carretera, seguros de equipaje, gastos médicos en el extranjero, etc.
Estas tarjetas permiten realizar los pagos de la misma forma que las particulares, pudiendo abonar todo lo gastado a principios de mes de forma gratuita o bien aplazar el saldo pendiente en varias mensualidades, con el correspondiente pago de intereses, que suelen estar entre el 15% y el 25%.
Además, en algunos bancos ofrecen la posibilidad de unificar el límite de crédito entre varias tarjetas, haciendo que tengan un máximo común que no puede superarse sea cual sea la cantidad que se haya utilizado con cada tarjeta.
Cómo elegir la mejor tarjeta para tu empresa
Para elegir la mejor tarjeta de crédito para empresas existen muchos factores a tener en cuenta, a continuación tienes algunos que te pueden servir de guía para decidirte:
- Control de los gastos. Como propietario de un negocio te interesa conocer bien todos los movimientos que se realizan en los saldos, por lo tanto, cuanta mayor información te proporcione el banco mejor.
- Comisiones. En este caso lo más importante es que se apliquen el menor número de comisiones posible, a poder ser ninguna. Existen tarjetas que directamente no tienen comisiones y otras en las que es necesario cumplir una serie de requisitos, como un gasto mínimo anual, para que no se aplique ningún gasto adicional.
- Flexibilidad. En el caso de que una misma tarjeta vaya a ser utilizada para diversos propósitos o por diversos empleados, es importante poder cambiar sus características con facilidad, por ejemplo el límite de crédito máximo o los establecimientos en los que puede ser utilizada.
- Bonificaciones por varias tarjetas. Si tienes intención de contratar diversas tarjetas, puede que el banco te aplique algún tipo de bonificación o descuento exclusivo. Si no es así, negócialo porque es fácil que te lo apliquen.
- Beneficios. Con frecuencia, las tarjetas empresariales están pensadas para incentivar el gasto en los empresarios, ofreciéndoles mayores recompensas. Esto dependerá de la categoría, que puede ser combustible, suministros de oficina, comidas, entre otras.
- Límites. Ya que las compañías suelen manejar más dinero que las personas promedio, los límites también son más altos. En promedio, un negocio recibe hasta 10.000 euros, lo que representa más del doble de un consumidor individual.
- Coberturas. Las tarjetas de crédito para empresas suelen ofrecer seguros adicionales y, en ocasiones, distintos a los de los plásticos particulares, como protección de la mercancía que se adquiere.
Aspectos clave al contratar una tarjeta para negocios
La comparación de estos productos financieros debe estar enfocada en varios puntos esenciales:
Clasificación de gastos
Debido a que el proceso de selección requiere de una evaluación meditada, necesitas revisar cuáles son las categorías de gastos más importantes del negocio en los últimos 6 meses. Esto puede hacerse a través del software de contabilidad que tenga o revisando los estados de cuenta asociados con los gastos registrados.
Son varios aspectos los que tienes que considerar con cuidado, como el combustible, los suministros de oficina, los proveedores de internet, los planes de cobertura móvil, entre otros. Además, debes analizar si estás pensando en compras futuras, contratación de personal o inversiones en equipos. Hay que priorizar cada categoría para encaminar tu decisión.
Ofertas de bienvenida
Al igual que con los plásticos personales, muchos bancos tienen promociones para propietarios de empresas que buscan tarjetas de negocios. Una promoción habitual es darte algún tipo de recompensa cuando alcanzas un límite determinado de gasto los primeros meses. Esto podría significar un monto en efectivo como crédito para saldo o cierta cantidad de millas/puntos.
Costes de la tarjeta de crédito para empresas
A la hora de comparar tarjetas de crédito de negocios, necesitas saber si tus costos justifican su contratación. Mientras que la cuota anual puede variar de ser gratis a costar un buen pellizco, los beneficios de este cobro deben ser suficientes para compensar su contratación. Además, tienes que tener en cuenta otros costes y comisiones, como:
- La comisión de adelanto de efectivo. A menudo necesitarás una inyección de liquidez para solventar alguna situación. En la medida que el porcentaje para esta transacción crece, más caro te saldrá.
- El cobro por transferencia de saldo. Así como existen plásticos con un porcentaje de 3-5 puntos por esta operación, hay otros que no lo permiten. Este aspecto es relevante si planeas mover balances considerables para pagar con mejores condiciones.
- El coste para transacciones internacionales. Usualmente en 3%, lo ideal sería encontrar una tarjeta de crédito que no te cobre este porcentaje si haces negocios en el extranjero. Esto te permite ahorrar en viajes y mercancía.
- Los tipos de interés sobre diferentes operaciones. Cuando tu negocio está en pleno crecimiento y no puedes pagar saldos completos, debes manejar bien el costo de los intereses. La oferta más atractiva te ayudará a invertir mejor tus recursos.
Estos son algunos de los factores que pueden ser interesantes a la hora de elegir un banco que te proporcione las tarjetas de crédito para empresa, pero cada caso es un mundo y puede que tú prefieras elegir otros. En todo caso, es importante comparar e informarse bien de todas las condiciones antes de contratar nada, para evitar sorpresas y poder elegir la opción más favorable.