Para elegir la mejor tarjeta prepago es importante conocer todas las condiciones que conlleva la contratación y utilización de cada una. Desde Busconómico hemos seleccionado las que pensamos que son las mejores según criterios de coste y comisiones, de descuentos y de versatilidad en su uso. En nuestra lista de tarjetas prepago podrás ampliar la información de cada una o bien visitar la web del banco para contratarlas directamente a través de Internet.
- Cuota anual:
6 €
- Límite de crédito:
Consultar
- Dinero a débito gratis en: Servired
- Cuota anual:
0 €
- Límite de crédito:
900 €
- Cuota anual:
0 €
- Límite de crédito:
Consultar
- Dinero a débito gratis en: En todos los cajeros de Ibercaja y 3 veces al mes en cajeros de otras entidades. Menores de 31 años gratis en el extranjero.
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Las tarjetas prepago se pueden utilizar para las mismas operaciones que las tarjetas de crédito y de débito, es decir, realizar compras en establecimientos físicos o en Internet, en cualquier lugar en donde sean aceptadas, o bien sacar dinero en efectivo de un cajero automático.
La principal diferencia con las otras modalidades, es que las tarjetas prepago tienen un saldo que tiene que ser cargado previamente, mientras que las de tarjetas de débito cargan el saldo directamente en la cuenta corriente asociada, y en las de crédito, el importe es cargado de forma aplazada.
Su uso es similar a un monedero, en el que introducimos dinero previamente que vamos gastando hasta que se acaba. Si queremos seguir utilizándola tendremos que volver a cargar más saldo. Esta forma de funcionar puede resultar muy útil para lo siguientes casos:
- Controlar el gasto. Como no se puede utilizar más allá del saldo que hayamos cargado en la tarjeta, nos sirve para no gastar más de lo que queremos. Si queremos ir de compras pero no queremos superar una cierta cantidad, una forma de evitar tentaciones es disponer del saldo justo.
- Realizar regalos. Hay muchas tarjetas prepago que son anónimas, por lo que pueden ser utilizadas por cualquiera que las posea. Se trata de una fórmula perfecta para realizar regalos, de forma similar a los cheques regalo de muchas tiendas, pero aún mejor, ya que el saldo puede ser utilizado en cualquier establecimiento.
- Comprar a través de Internet. Es una de las formas más recomendadas para realizar compras a través de la red, debido a su seguridad. Mucha gente tiene miedo a la hora de utilizar una tarjeta bancaria para adquirir productos y servicios online, por si le roban los datos y realizan compras con ellos. Con una tarjeta prepago esto ya no es problema, porque simplemente hay que cargar previamente el saldo justo para lo que queremos comprar y así no pueden quitarnos nada aunque tengan los datos de la tarjeta.
Cómo elegir la mejor tarjeta prepago
El proceso de elegir una tarjeta monedero que se adapte a nuestras necesidades pasa por tener claro para qué la vamos a utilizar y por qué queremos elegir este medio antes que una tarjeta de débito o de crédito. Los casos mencionados anteriormente suelen ser las razones más comunes que hacen a la gente decantarse por este tipo de plástico.
Algunos factores a tener en cuenta para elegir la mejor tarjeta prepago son los siguientes:
- Comisiones. Es la característica más importante a la hora de elegir estos monederos electrónicos. Estas tarjetas pueden tener gastos de emisión y de renovación, como el resto de tarjetas bancarias, pero también pueden tener otra comisión particular, la de recarga. Cada vez que se ingresa saldo en la tarjeta es posible que la entidad emisora nos aplique una prima, que puede ser fija o bien un porcentaje de la cantidad cargada. En este último caso, no suelen superar el 4% del importe.
- Vinculaciones. Podemos encontrarnos dos tipos de tarjetas prepago. Por una parte están las que van vinculadas a una cuenta corriente, desde la que se realizarán las recargas de saldo y que, por tanto, van vinculadas a una entidad financiera. Por otra parte, están las tarjetas sin vinculación, que pueden ser contratadas aunque no seas cliente de la entidad que las emite, por tanto pueden obtenerse sin cambiar de banco. Éstas últimas pueden ser cargadas mediante aportaciones desde distintas cuentas y desde cajeros automáticos.
- Descuentos. Como ocurre con el resto de tarjetas de crédito y débito, las prepago también pueden ofrecer descuentos en distintos establecimientos al realizar compras. Se trata de un factor a tener en cuenta a la hora de contratar una, ya que si entre esos establecimientos se encuentra alguno al que acudimos frecuentemente o en el que tenemos pensado gastar bastante dinero, puede resultarnos rentable obtener una de estas tarjetas para aprovechar la oferta.
- Confidencialidad. Existen tarjetas monedero que no tienen un titular asociado, por lo que las compras que se realicen con ellas no quedan registradas a ningún nombre y no pueden ser rastreadas. Es exactamente igual como si pagaras en efectivo.
Como ves, elegir la mejor tarjeta prepago puede depender de varias características que, según tus necesidades podrán ser más o menos importantes. Desde Busconómico hemos elegido las que pensamos que son mejores atendiendo a factores de coste de comisiones, de descuentos y de vinculaciones, para que puedas encontrarlas todas en un único lugar y no tengas que ir buscandolas una a una por Internet.